Un
Barça especulativo se conforma con el empate ante un Málaga peleón
MÁLAGA, 27 (EUROPA PRESS)
El Barcelona especuló en La Rosaleda y, aunque prosigue con su racha
positiva y ya engancha 15 partidos sin conocer la derrota, no pudo
conseguir los tres puntos.
El encuentro fue bonito durante la primera mitad. El Málaga saltó al
césped muy concentrado en la necesidad de obtener los tres puntos. Bien
plantado sobre el césped y con Zárate por Agostinho, los locales
acumulaban más hombres en el centro del campo y controlaban el juego. El
partido estaba vivo gracias al ímpetu inicial malaguista. Los hombres de
Serra Ferrer superaron bien los primeros diez minutos y se sacudían la
presión con el control de Rivaldo y la velocidad de Overmars. De los
Santos tenía la lección bien aprendida y cortaba con faltas los avances
'culés' para que los de Peiró avanzaran en busca del premio. Aunque el
Málaga transmitía sensación de peligro, no terminaba de enganchar una
buena jugada, en buena parte porque la construcción era un tanto
precipitada. Balonazos continuos a Darío Silva y Canabal que no terminaban
de deshacerse de Abelardo y De Boer, muy sobrios en el corte.
A pesar de ello, la imagen del Barça estaba por los suelos y Rivaldo
tuvo que unirse a las labores defensivas para achicar balones. Un
espectacular choque entre Rojas y Gerard hizo despertar al equipo catalán.
Simao, muy perdido en la primera mitad y siempre superado por Valcarce,
gozó de la primera oportunidad. Cocu se fue por la izquierda y el
portugués acertó a rematar dentro del área. Larraínzar tuvo que sacar bajo
palos. Tras el despeje, Abelardo no llegó a tiempo cuando estaba solo en
el segundo palo.
DOMINIO BLAUGRANA
A partir de ahí, el partido sólo tuvo un color: el azulgrana. Con el
inicio de la segunda mitad, se sucedieron las ocasiones visitantes. El
'Barça' cogió el 'toro por los cuernos', adelantó líneas y volcó el juego
por la banda derecha, en la Valcarce no encontraba la colaboración de
Zárate. Tocaba, tocaba y tocaba hasta encontrar huecos. La defensa
blanquiazul ya no era tan férrea y Kluivert comenzó a crear peligro.
Rivaldo, sujeto por De los Santos, tocaba el balón a diez metros de la
frontal. El gol parecía cerca. Los costasoleños acusaron el desgaste y
esperaron atrás pero, esta vez, renunciaron al contragolpe.
Rivaldo, Kluivert y Cocu pudieron inclinar la balanza pero no tuvieron
suerte. Con la salida al campo de Ismael, el partido se durmió. Aunque el
delantero navarro no tocó bola, su entrada adormiló a un equipo catalán
que parecía conformarse con el reparto de puntos. No tuvo hechuras este
Barça de campeón. No fue a por el partido y sólo obtuvo el botín por el
que apostó, un punto, que puede ser insuficiente para seguir el ritmo
madridista. Al final, en el tiempo de descuento, De Boer, sacó astutamente
una falta y Contreras evitó el gol.